martes, 15 de octubre de 2019

Deja de ser indiferente a lo que te rodea, la vida es una sola y uno es el principal participe de su destino. Vamos buscando la piedra zafira en cada espacio, la perfección inexistente, la predicción de los astros y el sutil destello de alguna gran idea que nos transforme y nos libere de lo errático. Somos vagabundos de una galaxia perdida. Quien más se acerca a la verdadera fuente más comprende que solo queda el retorno para evolucionar. No tengo casa propia en esta planicie estelar, soy de todos lados al mismo tiempo. Mi casa es el viento...mi vida una porción del presente. Quiero regresar a la morada habiendo cumplido mi parte. "Ya dije lo indecible, ya predije lo incierto" pero todavía no domino el mecanismo de lo eterno.

Llegó un tiempo...

"Llegó un tiempo a deshoras y se ocultó tras la brisa inquieta de la mañana. Ya no podía engañar a nadie, era el momento de definir su esencia. Se preguntaba siempre: ¿Por qué la madrugada genera incertidumbre existencial? Es el segundo más despierto de la conciencia, el que arrasa con lo seguro y devela lo efímero. Basta detener el tiempo incesante para comprender la vastedad del mundo. Los caminos pueden variar a cada paso, eso se llama libre albedrio. A veces dudamos si es cierto lo que ocurre o estamos inmersos en un sueño pasajero. Lo volatil somos nosotros en este juego de luces y sombras.  No puedes arreglar el mundo debes sanarte primero, es lo esencial y urgente." 

sábado, 5 de octubre de 2019

No es solo...
No es solo la sutil ignorancia que nos separa del verdadero camino sino también las vicisitudes y los contratiempos. A veces desviamos la barca para retomar impulso y salir de lo estrecho para revivir una y otra vez como el Ave Fénix. Incansable, desnuda sus alas y renace esperando el siguiente guión. No es solo la sutil indiferencia que nos separa del resto lo que no nos permite amar y ser amados también se ejecutan una serie de bloqueos no naturales que arraigan en lo más recóndito del ser. Difíciles de destrabar son aquellos que han encarnado en la esencia a través de las múltiples vidas. Ya no soy el que dibuja estas líneas como cuadros al óleo en pleno proceso. Puedo alcanzar a plasmar lo que quiera pero tengo un tiempo, hasta que se seque el aceite y la pintura endurezca. No es solo lo que pensamos, día tras día, lo que derriba los muros o levanta edificios, también lo son el deleite o el sacrificio de las horas. Esta bien matar la decadencia y dar paso a la trascendencia pero la segunda hay que sostenerla sino se esfuma en la vastedad de los sueños. No es solo lo que soy lo que determina el camino, también las actitudes me completan o me devastan. No es solo la pereza el principal de los males, dormimos sobre gruesos clavos que nos inquietan. No es solo el hombre que no camina o la raza que se atrasa, es todo lo que nos rodea lo que debemos cuidar antes que llegue el alba.

El caminante solar

Resolver las cuestiones pendientes , los gritos ahogados en el aire, la mazmorra de la humanidad que nos apresa, somos entes espaciales mira...