viernes, 19 de marzo de 2021

El caminante solar

Resolver las cuestiones pendientes,

los gritos ahogados en el aire,

la mazmorra de la humanidad que nos apresa,

somos entes espaciales mirando hacia el abismo, 

una catarata de planetas,

toda la inconsistencia de lo que acontece se esfuma entre las manos lumínicas,

aquello que apenas aferras.

Eres del grupo que sabe la verdad de los hechos pero no te atreves a pronunciarlo.

Aquel nombre te destruiría, el nombre sin rostro, el nombre oculto tras las sombras.

Pero en el fondo te dices: "es solo la punta del misterio". Nadie sabe a ciencia cierta que se esconde tras la valla.

El caminante solar te acompaña en este juego de vueltas. Una y otra vez, allí está, esperando tu mano para arrojarse al vacío, las estrellas, el cielo, la galaxia, los mares, todo transforma la esencia.

Somos varios en uno y uno en varios. Es así y ya lo sabes.

viernes, 4 de diciembre de 2020

Eres tu propia esencia, la esencia de aquello que a veces sueñas

sueltan la vida tus manos encalladas de ausencia

bajo las sombras tus viejas vidas terrenas

lo indecible

parágrafos inútiles, inconsistencias

no eres la herramienta que abre las compuertas

te has dado cuenta de tus conflictos y yaces...aún en la espera del matrimonio con lo eterno. La miel de tu mirada lamen las abejas, su perfume de misterio agitan las rosas...

Porque hay misticismo en el abandono de lo cotidiano. Son simples líneas ejecutadas al unísono, alguien me las dicta al oído mientras juego a crear las condiciones necesarias para el olvido. Lastima el frío de mi piel ultraterrena... estoy siempre cazando palabras como auguran los grandes poetas. Impredecibles las ráfagas del viento, las metrallas de mi boca, sin control recibo los anuncios del futuro, algo ocurre en la lejanía del tiempo...son parágrafos inútiles, inconsistencias. Todo desaparece cuando el sol amedrenta a la sombra, no hay caos, solo superficies invisibles. Es curarse de la magnitud del ego...

Son simples líneas ejecutadas al unísono...la canción de la materia.



   

viernes, 25 de septiembre de 2020

La vereda sobre la que no da el sol...

Todos los transeúntes cruzaban hacia el otro lado, hacia el lado de la luz, ninguno se quería mojar con la sombra, suficiente tenían con lo abrumadora que les resultaba la rutina de oficina para seguir oscureciendo su persona. Algunos rostros se veían demacrados por las exigencias de los tiempos y el cumplimiento de las tareas, los boxes de las oficinas estaban abarrotados de papeles. Unos sobre otros formaban inmensas torres de concreto ficticio y se apilaban descaradamente, burlándose de los trabajadores. Nadie se atrevía a desobedecer las estrictas órdenes de Manfredi, un hombre robusto y de carácter riguroso, con el que ningún oficinista pretendía generar algún altercado que pusiese en riesgo su puesto en la empresa. ¡El viejo zorro de Manfredi! Cuantos lo admiraban por su osadía para enfrentar los desafíos más impredecibles de la compañía, esa entereza que lo caracterizaba, siempre bien parado como un búfalo. ¡Maldito el día que me lo crucé por delante! .

 El tano Manfredi era uno de esos tipos mal llevados, que emiten pocas palabras pero con una mirada lo dicen todo, enmarcado su rostro con unas cejas bien gruesas, producto de herencia familiar. Su padre había sido el típico comerciante italiano, vendedor de zapatos, discutidor hasta la muerte con los cuestionamientos de sus clientes por el tamaño de los talles y la forma de confección del calzado. Pero esa insistencia de carácter y la fortaleza innata de aquel que nace destinado para un fin comercial lo habían convertido en un "león del mercado", él mismo se consideraba el mejor en la rama de ventas y detentaba que sus zapatos eran los de mayor calidad artesanal jamás vista. Lamentablemente el disfrute de su creencia le duró poco, a los meses de haber extendido sus regalías por todo Latinoamérica y comenzar a dispersar su imperio por todas partes, una tarde lluviosa de mayo, su corazón dejó de latir. Lo encontró su mujer, sentado en el sofá de sus siestas espontáneas, aún con la pipa encendida ocupando su boca y un vaso de scotch sobre la mesa.

 El diario de la mañana anunciaba la muerte del empresario Miguel Tulio Manfredi, el "león del mercado". Su hijo mayor, Nano Manfredi, alias "el tano" ocuparía semanas más tarde su cargo en la empresa.

viernes, 18 de septiembre de 2020

 La vida como una escuela...

La vida es como una gran escuela, aprueban aquellos que sienten una cercanía con la trascendencia y circundan sus caminos inhóspitos los que pretenden gozar y vivir el presente, el "tempus fugit" señalaban los antiguos poetas, se nos va de las manos, irreverente, soberbio, nos da vuelta la cara, toma de nuestro mate en la mesa y nos sorbe la esencia de lo cotidiano. Pasa por nuestras gafas que se van ajando con los años y ya no vemos igual la piedra en la carretera, ahora es de otro color, el dolor se hace más tenue casi imperceptible y el hombre aprende a vivir en su rutina. ¡Cuanta miseria instalada en los collares de perlas! y en los abrigos de pieles que vestiste antaño, una sola marca en la pisada, una súbita risa y el desprendimiento de todo lo que fue y ya no se puede recuperar. ¿No es acaso la nostalgia un juego de niños? Los cuadros de la vida colgados en los pasillos de mis sentimientos y más escenas que rememoran lo estrictamente biográfico. Alguien llama a la puerta a estas horas de la tarde, un recuerdo lejano abriga la acera, son lastimeros los entes de las calles. Nadie estremece, nadie abraza, solo un beso perdido en el aire es la prueba de la existencia. 


viernes, 15 de noviembre de 2019

La batalla del Gran Gobierno.

Sobre el Gran Gobierno cayeron las explosiones, las ráfagas de metralla impactaban contra los cristales de los autos, ni un solo transeúnte se ánimo a enfrentar la batalla, eran como autómatas siguiendo un pulso inexistente. Al rato se dispersaron entre los escombros aquellos que habían iniciado la pelea. Los hombres de hojalata tenían su propio refugio, a miles de quilometros bajo la tierra. Otra arremetida más y seria el fin de la humanidad. Corría el año 2060 de la era de Acuario. Los recursos naturales escaseaban y la madeja de la inconsciencia todavía no había sido desatada en el planeta, el plan general había fallado en su aplicación. Los seres galácticos habian hecho todo lo posible por salvar a la raza de la destrucción final. Por unanimidad, el Consejo decidió el cierre de los portales. Algunos pocos votaron en contra, con la esperanza de la redención. El pueblo fue acusado de avaricia y enajenación. Se les permitió a los hombres de hojalata que hicieran el resto de la tarea. La voz del consejero mayor anunciaba: "Cuantas décadas de intentos para transformar la esencia álmica, sin remedio cayeron en los supuestos y la estulticia que invadió el tiempo los despojó lentamente de sus capacidades. No pudieron acceder al cristal profundo de la verdad. La mente no fue liberada y eso trajo como consecuencia la cancelación de todo traspaso a los planos superiores. El hombre prefirió quedarse en la caverna y ver pasar las sombras de la existencia. Nosotros, los hombres del consejo, decidimos claudicar al esfuerzo de mantener a salvo los patrones lumínicos que quedaban latentes en el interior de la raza. Sin más, pedimos a los participantes de la asamblea que dictaminaran la respuesta. Resolución: positiva la infiltración de nuevos códigos etéreos y reprogramación de materia genética, apertura hacia nuevos mundos y culminación de una era" El antiguo plan fue cancelado de inmediato.

martes, 15 de octubre de 2019

Deja de ser indiferente a lo que te rodea, la vida es una sola y uno es el principal participe de su destino. Vamos buscando la piedra zafira en cada espacio, la perfección inexistente, la predicción de los astros y el sutil destello de alguna gran idea que nos transforme y nos libere de lo errático. Somos vagabundos de una galaxia perdida. Quien más se acerca a la verdadera fuente más comprende que solo queda el retorno para evolucionar. No tengo casa propia en esta planicie estelar, soy de todos lados al mismo tiempo. Mi casa es el viento...mi vida una porción del presente. Quiero regresar a la morada habiendo cumplido mi parte. "Ya dije lo indecible, ya predije lo incierto" pero todavía no domino el mecanismo de lo eterno.

Llegó un tiempo...

"Llegó un tiempo a deshoras y se ocultó tras la brisa inquieta de la mañana. Ya no podía engañar a nadie, era el momento de definir su esencia. Se preguntaba siempre: ¿Por qué la madrugada genera incertidumbre existencial? Es el segundo más despierto de la conciencia, el que arrasa con lo seguro y devela lo efímero. Basta detener el tiempo incesante para comprender la vastedad del mundo. Los caminos pueden variar a cada paso, eso se llama libre albedrio. A veces dudamos si es cierto lo que ocurre o estamos inmersos en un sueño pasajero. Lo volatil somos nosotros en este juego de luces y sombras.  No puedes arreglar el mundo debes sanarte primero, es lo esencial y urgente." 

El caminante solar

Resolver las cuestiones pendientes , los gritos ahogados en el aire, la mazmorra de la humanidad que nos apresa, somos entes espaciales mira...